Traducen al wixárika el himno de la Escuela Normal Rural de San San Marcos
Loreto, Zac.- En el marco de su 89 aniversario, la Escuela Normal Rural Gral. Matías Ramos Santos recibió como regalo la traducción de su himno a la lengua wixárika.
El responsable de esta traducción fue Facundo González Reza, un joven wixárika de 28 años de edad y egresado hace tres años de la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
Es un himno muy emblemático y conmovedor por lo que representa el normalismo rural en Zacatecas, comentó Marco Antonio Ledezma, profesor y exalumno de San Marcos promotor de esta iniciativa.
El himno se creó en 1966, cuya letra estuvo a cargo de Mario Sustaita Mauricio y la música bajo responsabilidad de J. Guadalupe Robles Guel.
Además de querer honrar la historia y trayectoria de la Escuela Normal Rural de San Marcos, la intención de esta traducción es darle mayor difusión a la cultura wixárika, a sus costumbres y a su filosofía de vida, que es muy humana, considera el profesor Marco Antonio.
El deseo de hacer la conversión del himno a la lengua wixárika fue idea de un grupo de docentes, exalumnos de esta escuela orgullosos de formar parte de ella.
Hace dos años, también como parte de un proyecto de este grupo de maestros y con el apoyo de Facundo González, se realizó un disco de cuentos y cantos infantiles en lengua wixárika, con creaciones del dominio público, destacando la riqueza de esta lengua.
Para Facundo fue todo un reto la realización de la traducción del himno de la Escuela Normal, ya que una frase en español puede llevar tres o cuatro palabras más en wixárika.
Fueron dos meses el tiempo que le llevó hacer la conversión a su lengua, sin dejar de tener presente la importancia que era darle este regalo a la Escuela Normal de San Marcos.
Al participar en éste y otros proyectos de traducción a su lengua, Facundo se siente agradecido y orgulloso de que le den la importancia que merece a su lengua y a su cultura.
Esta entrega del himno se hizo como un aporte y fomento a la cultura wixárika, esperando que no se pierdan las lenguas nativas, porque «cuando muere una lengua, mueren generaciones de conocimiento con ella», manifestó el traductor de este himno.